En las clases de yoga para niños se crea una atmosfera positiva que ayuda a relajarse y divertirse. Se desarrolla la fuerza, coordinación, flexibilidad, equilibrio ayudándole a tomar conciencia de su propio cuerpo sin olvidarnos de la parte emocional. Trabajaremos las emociones, autoestima y creatividad.
Durante la práctica se mezclan juegos, posturas, historias, dibujos…todos los ingredientes para pasárselo muy bien.